
“Nada ni nadie por encima de la ley” es una frase recurrente de Andrés Manuel López Obrador y la Cuarta Transformación, la cual se traduce en Estado de Derecho.
Por lo tanto, la estrategia política y electoral de llevar a consulta ciudadana el juicio a expresidentes de México es fallida y además, atenta contra las garantías individuales (violación de presunción de inocencia, audiencia y debido proceso) y la división de poderes (Poder Ejecutivo VS Poder Judicial).
La administración y procuración de justicia no pueden recaer en un individuo cuando prevalece un sistema democrático basado en instituciones.
La corrupción e impunidad no se combate en los medios de comunicación y redes sociales, sino en las instancias o autoridades competentes bajo el principio de legalidad.