Las ausencias no implican necesariamente que los y las legisladoras hayan dejado de laborar, ni descartan la comisión de labores relacionadas con sus cargos.
El Congreso de la Unión registró al menos 1 mil 899 inasistencias a sesiones completas del Pleno, de acuerdo con datos de la Gaceta Parlamentaria analizados por éste medio digital. Si la totalidad de las ausencias no fuera justificada y por tanto le fuera descontado un día de dieta a cada uno de los legisladores faltistas, el monto recaudado en multas ascendería a un aproximado de 5 millones 94 mil 867 pesos, considerando la dieta neta diaria de senadores (3 mil 493 pesos) y diputados (2 mil 467 pesos) establecida para 2020 en el Diario Oficial de la Federación.
De la cantidad de ausencias referida, 1 mil 499 corresponden a inasistencias a sesiones completas con votación en la Cámara de Diputados, y 400 a sesiones completas con y sin votación en la Cámara de Senadores. En el caso de la Cámara Baja, aún no es posible saber cuántas faltas fueron o no justificadas, aunque la mayor parte suele cumplir con los criterios del Artículo 48 del Reglamento de la Cámara de Diputados. En el caso de la Cámara Alta, las cifras oficiales indican que hubo siete casos injustificados entre el 31 de agosto y el 15 de septiembre de 2020.